No descubrimos nada nuevo al decir que la mayoría de nosotros somos reacios a los cambios. Sin embargo, en un sector tan dinámico como el automóvil es imprescindible afrontar retos para permanecer en la cresta de la ola un año tras otro. Esta ha sido, desde siempre, la filosofía del Grupo Meuri y, por fortuna, el tiempo (y los hechos) nos dan la razón.
Si el año pasado fue testigo de la irrupción explosiva de MG, que causó estragos en el mercado automovilístico por su calidad, precio y prestaciones, la sorpresa este año ha sido la llegada de Omoda. Durante la pasada feria FVO24 hemos sido testigos de más de un gesto de sorpresa al comprobar la calidad, los acabados y, en resumen, las sensaciones que trasmiten estos “recién llegados” por los que Grupo Meuri ha apostado fuerte, al igual que lo ha hecho por su marca hermana, Jaecoo, por Evo y por las ya conocidas DFSK y SWM. Infinidad de visitantes querían saber más sobre unos coches que, no lo olvidemos, pertenecen a la primera marca china que se va a implantar como fabricante en España y que va a poner de nuevo en el marcado a los añorados Ebro.
Ya hemos contado que la FVO24 ha sido, como siempre, otro éxito de ventas del Grupo Meuri, que se ha vuelto a erigir número uno de ventas, pero además, es de justicia destacar la buena marcha de Omoda y la magnífica acogida que le han dispensado los visitantes. Pocas cosas son tan gratas y satisfactorias como escuchar los comentarios de los que se acercaron a admirar las creaciones de esta marca joven por la que el Grupo Meuri apuesta fuerte y para la que se ha abierto un moderno concesionario oficial en Erandio, bajo el puente Rontegui.
Como decíamos al principio de este post, es muy difícil romper la inercia de un mercado dominado desde el principio por las marcas europeas, pero éxitos como los acontecidos con Omoda durante FVO24 validan las decisiones valientes, a la par que amplían el horizonte de elección para los que quieren cambiar de coche y buscan calidad, precio y diseño.